Fecha: 02.08.2022.
Ha comenzado el 33º Encuentro Internacional de Oración de Jovenes, Mladifest en Medjugorje. La Santa Misa de la primera noche del Mladifest fue celebrada por el Arzobispo de Barcelona y Presidente de la Conferencia Episcopal de España, Cardenal Juan José Omella.
Antes de la Santa Misa, que fue concelebrada por nueve obispos y arzobispos y 483 sacerdotes, se desfiló con las banderas de más de setenta países de los que este año llegaron peregrinos al Festival de Jóvenes, y a continuación el mensaje del Santo Padre , papa Francisco a los participantes Del Maldifest fue leída por el visitador apostólico con un papel especial para la parroquia de Medjugorje, el arzobispo Aldo Cavalli.
“Aprended de mí y encontraréis la paz” (Mt 11, 28-30) es el lema del Festival de Jóvenes de este año, y este es exactamente el lema que el Papa Francisco explicó a los jóvenes, e invitaba a los jóvenes a acudir a Jesús con el corazón abierto.
“Queridísimos, no tengáis miedo, id a Él con todo lo que lleváis en el corazón. Él es el único Señor que nos conforta y nos ofrece la verdadera paz. Seguid el ejemplo de María, Su Madre y nuestra Madre, que os llevará a Él. Confiaos a ella, que es la Estrella del Mar, el signo de esperanza en el mar revuelto, que nos conduce al puerto de paz. Ella, que conoce a su Hijo, os ayudará a imitarlo en vuestra relación con Dios Padre, en compasión por nuestros prójimos y en la conciencia a lo que estamos llamados: a ser hijos de Dios. En este momento, en pleno verano, el Señor os invita a ir de vacaciones con Él, al lugar más especial que hay, y este es tu propio corazón”, dice, entre otras cosas, el mensaje del Santo Padre, quien encomendó a los jóvenes a la Santísima Virgen María.
“Queridos jóvenes, mientras descansáis en Jesucristo estos días, os encomiendo a todos a la Bienaventurada Virgen María, nuestra Madre celestial, para que por su intercesión y ejemplo podáis tomar sobre vosotros la dulce y fácil carga de la imitación de Cristo. Que os acompañe la mirada de Dios Padre que os ama, para que en el encuentro con los demás seáis testigos de la paz, que a su vez recibiréis como don. Oro por esta intención y os bendigo, y también me encomiendo en vuestras oraciones.”, se afirma en el mensaje del Papa Francisco a los participantes del Festival de Jóvenes, que les fue transmitido por Mons. Aldo Cavalli.
El padre Marinko Šakota, párroco de Medjugorje, agradeció al Cardenal Omella por venir a Medjugorje, y al comienzo de su homilía, el Arzobispo de Barcelona Juan José Omella dijo que está "profundamente feliz y muy agradecido a Dios de poder estar con todos vosotros y celebrar esta Eucaristía en esta tierra de María." en la parroquia de Međugorje, en la apertura del 33º Festival de Jóvenes. Agradecio a Mons. Aldo Cavalli por la invitación y los sacerdotes franciscanos por la calurosa acogida.
El cardenal Omella dijo entonces que él "viene de España, un país muy mariano" y que en 1982, al salir de España al final de su visita pastoral, san Juan Pablo II. dijo: "Adiós, España, tierra de Maria Santísima".
“Nací en un pueblecito de Aragón, una región donde la Virgen María ha tenido y tiene una presencia muy especial. Mi pueblo pertenece a la diócesis de Zaragoza. En la ciudad de Zaragoza hay una enorme y preciosa basílica dedicada a la Virgen María, bajo la advocación del Pilar. En dicha basílica se conmemora que, en torno al año 40 dC, tuvo lugar la primera aparición de la Virgen María reconocida por la Iglesia. Siempre digo que no hay ninguna como esta, ya que, como dice la tradición, la Virgen María se apareció en carne mortal al apóstol Santiago. Gracias a esta inesperada visita, el apóstol Santiago, según dice esa misma tradición, recuperó las fuerzas para proseguir su camino de evangelización” , dijo el cardenal Omella, y relató otro milagro por intercesión de la Virgen del Pilar en la pequeña localidad de Calanda en la diócesis de Zaragoza, donde fue párroco, y luego les dijo a los jóvenes que “¡es realmente impresionante todo lo que la Santísima Virgen María está dispuesta a hacer para llevarnos al encuentro de su Hijo y nuestro hermano Jesucristo!”.
“Cada uno de nosotros se puede preguntar ¿Por qué he venido a este rincón de Europa? ¿Qué estoy haciendo aquí? Muchos de vosotros, como yo, estáis aquí por primera vez. A lo mejor os hacéis estas preguntas u otras parecidas. A lo mejor algunos familiares y amigos os han empujado a venir hasta aquí. Si estáis aquí es porque Jesús y María lo han querido. Empieza una semana única, dejaos llevar y guiar por Santa María, nuestra madre.
La vida es preciosa y merece ser vivida con toda su intensidad. Durante la vida vamos librando sucesivos combates y, en ocasiones, el mal a veces nos gana la partida y se apodera de parcelas de nuestra existencia. Sí, el mal va dominando y subyugando aspectos de nuestra vida. Nuestra vida es un camino de conversión continua para, con la ayuda de Jesús y de María, identificar y vencer aquellos parásitos que nos están robando la vida” , dijo monseñor Omella e invitó a los jóvenes a utilizar “esta semana para reconciliarse con Dios en este confesionario del mundo, en Medjugorje''.
“Estos días en Medjugorje la Eucaristía va a ser el lugar central para el encuentro con Dios Padre, con Jesucristo y el Espíritu Santo; para el encuentro con santa María, san José, los ángeles y todos los santos; para el encuentro con nuestros hermanos y hermanas difuntos. Todo lo que vivamos esta semana nos va a ayudar a recentrar toda nuestra existencia en el encuentro con la Santísima Trinidad en la celebración de la Eucaristía. En ella hemos de encontrar la fuente y la luz de todas nuestras acciones. Nosotros, como decían los mártires de Abitinia, no podemos vivir sin la eucaristía, sin el domingo, sin el día del Señor”, dijo monseñor Omella y al final clamó: “Santa María, Reina de la Paz, ruega por nosotros y por el mundo entero”. (FOTO)
